Los sindicatos y asociaciones -entre las que está UnionGC-, unidos con el objetivo de luchar por los derechos de toda la sociedad en Islas Baleares, denunciamos la falta de ética en las actuaciones de las nuevas plataformas sindicales aparecidas en la Comunidad Autónoma.

El objetivo de la unión entre los diferentes grupos de presión ha de ser, siempre, con vistas a la mejoría de la situación actual; evitando vetar y silenciar colectivos. Ante la situación mencionada, UnionGC y todos los sindicatos y asociaciones unidas para la prosperidad de Baleares, observamos la demostración de falta de responsabilidad y rigor en las acciones, hechas únicamente por la imagen. 

A lo largo de nuestra unión, hemos demostrado nuestro objetivo de mejorar los servicios públicos; consiguiendo la aprobación de varias Proposiciones No de Ley a diferentes niveles autonómicos, tomando cartas en asuntos de interés público, mejorando la situación de productividad especial para la Policía Nacional y Guardia Civil en Ibiza, entre otros.

Las unidades sindicales tienen como objetivo la prosperidad general; evitando mezclar intereses propios de las asociaciones. Por ello, todas las uniones sindicales que atenten contra la acción unitaria; ya sea vetando la participación o excluyendo a colectivos, destruyen la posibilidad de acción real.

Además, estas plataformas nacen con problemas en el planteamiento de las mismas; confundiendo los ámbitos de competencia estatal, autonómico y local. Cada administración define sus políticas retributivas y, por ello, existen importantes diferencias salariales según la administración a la que se pertenece. De esta forma, no se puede pretender una solución a un problema complejo. 

Por nuestra parte, expresamos toda la solidaridad con las personas trabajadoras en otras administraciones que sufren la falta de compensación de la insularidad. Y a su vez, reafirmamos nuestro compromiso con la sociedad Balear. 

Seguiremos actuando de forma seria y responsable por la unidad de acción sindical, la calidad de los servicios públicos y la calidad de vida de las personas que trabajan al servicio del Estado.